OBITUARIO

A las 03:20 terminó de quemarse la segunda casa de muchos jóvenes científicos con futuro prometedor en la Facultad de Ciencias de la Universidad de Chile.

El Laboratorio de Neurobiología y Biología del Conocer (El Rayo) fundado por Humberto Maturana ya no existe. Todo se consumió en el calor de un incendio feroz que se propagó rápidamente después de que estallara un balón de gas de oxígeno que se encontraba al interior del RAYO vecino al laboratorio de cromatografía de Silvia Copaja. Los materiales ligeros de la construcción ardieron hasta que quedara nada.

Luego de que bomberos apagaran el fuego, revolvieron todo y volvieron a apagar los posibles remanentes bajo los escombros.

Lamento que Suárez, Fredes y Vega hayan perdido su material de tesis, que Mpodozis, Marín y Letelier vean esfuerzos de años transformarse en cenizas y vapores tóxicos. Que para Pottstock, Ahumada, Cortés y Faunes las cosas se pongan tan lentas y terribles ahora.

¡¡¡Maldito sea el destino maricón!!!

El último en salir es quien escribe este triste obituario. Apagué las luces, me cercioré que todo estaba en orden, antes de colocar la alarma y echar dos vueltas al cerrojo, aprox a las 01:45 hrs de este funesto 05 de Agosto de 2006.

Habrá que reconstruirlo todo, y comenzar de nuevo. ¿Alguien quiere contratar a un biólogo cesante? Abrazos a la gente a quienes esta noticia deje knockeados. Es una terrible pena.

Adiós Rayito, siempre estarás en nuestros corazones...